Coatepec, Ver.
Martes 07 de Abril de 2020
La contingencia provocada por el virus SARS Cov 2-Covid 19 no sólo afecta a quienes son portadores o pacientes de la enfermedad, sino ha generado una onda expansiva igualmente agresiva, destructiva y que también está dejando secuelas muy graves, en este caso en la economía local, lo que ha dejado a la vista la existencia de "dos Coatepec's", ambos buscando sobrevivir y superar esta emergencia sanitaria nacional.
La "división" que el Covid 19 ha provocado en la cabecera municipal de Coatepec es muy marcada: la desolación de la zona considerada "turística", donde se asientan los diversos restaurantes y cafeterías que en otros años, en estas fechas (recuérdese que estamos en plena Semana Mayor) estaban atestadas de clientela de toda índole.
Esta "zona" no es muy grande, pues realmente se circunscribe al entorno del Parque Miguel Hidalgo, si acaso se podría añadir a restaurantes un poco fuera del centro como Italian Coffe en la calle de Morelos, una sucursal en la misma calle casi esquina Aldama del restaurante Finca de Andrade ahora llamado "don Marco" y otros tres centros de consumo: una ostionería en la esquina de Morelos y Aldama, una cafetería en la famosa Casa de los Azulejos y un restaurante ubicado casi junto a la sucursal de Banamex.
Otro restaurante, que no es considerado precisamente turístico, si acaso más exclusivo por el nivel de los clientes y por la exclusiva carta que maneja, sería el restaurante del Hotel Posada Coatepec. Este restaurante, aunque icónicamente hablando se encontraría en el corazón del Pueblo Mágico, realmente y en la práctica, está fuera del "primer cuadro"
Y hasta aquí podría considerarse la "zona turística" pues aunque decenas de negocios dedicados a la gastronomía operan en calles adyacentes al centro histórico, éstos son visitados por clientela muy local.
Por otra parte resalta "la otra zona", el Coatepec popular, al que asisten cotidianamente las amas de casa, los trabajadores, obreros, gente que baja de comunidades a comprar, vender, buscar trabajo y también a consumir en las cocinas y locales en general de comida preparada.
Se podría decir que el corazón de este "Coatepec Popular" es el Mercado Rebolledo y sus alrededores, que se encuentra apenas a unos 100 metros en línea recta a un costado del Palacio Municipal y del Parque Miguel Hidalgo, en donde está "la zona turística".
Ahí, al "Rebolledo", aún en estos días de contingencia, la gente local no ha dejado de asistir.
Si bien es cierto que la afluencia no es la misma, lo que es explicable, ya que las amas de casa aprovechaban la salida y entrada de las escuelas para realizar sus compras, se reconoce que las ventas, aunque bajas, se mantienen.
Los negocios de todo tipo, al menos hasta este martes, luchan por mantenerse vigentes ante un público que camina por las calles.
Los efectos negativos podrían reconocerse en principio en los taxistas, que advierten que ante un descenso en el público asistente, en la misma proporción ha bajado el pasaje y número de corridas.
¿Hay quienes no resienten la crisis sanitaria en el entorno del Rebolledo?. Sí. El ambulantaje, y más concretamente las llamadas "carretillas" que con diversas frutas, siguen despachando su mercancía sin aparente afectación.
Otros comerciantes que atienden a un público diverso, entiéndase visitantes y locales, son los negocios del Parque Miguel Hidalgo en el corredor que da la cara a la calle Lerdo. Éstos comercios, todos considerados dentro de la venta de "comida" de todo tipo, se mantienen, con restricciones, pero no han dejado de atender.
No así los trabajadores de la limpieza de calzado, mejor conocidos como "betuneros", que principalmente los que se ubicaban en el mismo Parque, pero con cara a la calle Luis de San José, quienes sin más tuvieron que retirar sus sillas, al quedar cerrado el ingreso de personas al Parque.
Los efectos en la "zona turística" no se han tardado en aparecer: recorte de personal en las cafeterías que operan en el entorno del Parque, ante una ausencia de clientela.
Cierre de al menos tres restaurantes: uno en Jiménez del Campillo, otro en calle Aldama y otro en la calle de Melchor Ocampo.
Suspensión de los trabajos de habilitación, que por cierto iban a marchas forzadas ante la proximidad de la Semana Santa, de lo que sería la nueva sucursal La Parroquia en la esquina de Luis de San José y calle 5 de Mayo. En este caso, también el aplazamiento por tiempo indefinido de ingreso de quienes ya estaban contratados para iniciar operaciones en este nuevo restaurante.
Por último, otros afectados, que aunque parezca chusco es un tema real, es el cúmulo de oferentes de diversos "recuerdos" y pequeñas artesanías que se buscaba vender a visitantes foráneos que llenaban el parque y las mesas de todos los restaurantes del centro.
Estos "comerciantes" definitivamente se quedaron sin clientela potencial.
En esta lista, tomando como base años anteriores, también se quedaron sin espacio, y por ende sin ingresos, los tianguis artesanales y de diversos productos que aprovechaban la llegada del turismo, para colocarse en carpas en los corredores del Parque Hidalgo e incluso en el mismo interior del Palacio Municipal.
Esa imagen de ver un Coatepec lleno de gente, lo que representaba trabajo, ingreso, ventas, derrama económica, será una imagen que tendrá que esperar un tiempo para volver a ser una realidad.
Y sin embargo, los coatepecanos remontarán esta crisis. Sin duda ¡¡ saldrán de esta ¡¡.
